20 Consejos Acerca de la Alimentación de un Dogo de Burdeos. Por Arturo Martínez Mateos.

Frecuentemente, clientes y amigos me preguntan acerca de la alimentación que doy a mis perros. Luego de varios años de experiencia en la crianza del Dogo de Burdeos, la lectura de decenas de artículos y textos relacionados al tema, además de haber trabajado en una empresa líder en la fabricación de alimentos y gracias a los consejos de científicos y veterinarios expertos; he adoptado un programa de alimentación para mis perros, que me ha dado magníficos resultados en la crianza de cachorros, el mantenimiento de adultos en óptimas condiciones y para competir en el ring de belleza. Así que, sin considerarme un profesional en nutrición canina, cuando me preguntan, me atrevo a dar los siguientes consejos:

Los requerimientos nutrimentales de un perro no son iguales que los de un ser humano. Por lo tanto, alimentarlo con sobras de la familia, o con alimento preparado en casa, puede no ser lo correcto, a menos que usted sea un experto en nutrición canina y sepa como balancear su dieta con todos nutrimentos adecuados y de origen fresco para su dogo. De otra forma, alimentarlo así, puede acarrear serios problemas a su mascota, o cuando menos evitar que su perro alcance su máximo potencial. Claro está que no hay como el alimento natural, fresco y con la menor cantidad de procesos, pero cuando desconocemos el balance ideal de nutrimentos que debe darse a cada perro, según su edad, raza, condición corporal, actividad física diaria, etapa de su ciclo reproductivo, influencia del clima, etc.; así como por practicidad, lo mejor es utilizar un alimento comercial concentrado, de calidad súper premium, si quiere que su dogo alcance su máximo potencial, y permanezca sano y feliz por más tiempo.

Para distinguir un alimento de calidad súper premium de uno que no lo es, la regla más básica es referirse a la lista de ingredientes y ver el que se menciona en primer lugar. Este debe ser invariablemente CARNE, preferentemente de pollo o cordero (a menos que su perro sea alérgico a éstos). Como segunda alternativa, se puede utilizar los que mencionan HARINA DE CARNE como primer ingrediente. Las que tienen cereales, soya o harina de sub-productos animales como primer ingrediente, no son alimentos de primera calidad, aunque su publicidad o empaque diga lo contrario. Los alimentos súper premium se venden principalmente en veterinarias y tiendas de mascotas. Pero ahora también se pueden conseguir en México y otros países, a un precio mucho más bajo, en algunas tiendas de autoservicio tipo club.

La razón para utilizar un alimento super premium vs uno de menor calidad, es su mayor biodisponibilidad o su facilidad de digestión, asimilación y uso para funciones biológicas de sus ingredientes por parte de su perro. Todos los alimentos tienen una tabla de nutrimentos y porcentajes que contienen por ración. En esta no van a encontrar mucha diferencia entre el peor y el mejor, pero lo importante es que tan asimilables son sus ingredientes. Un cuero de suela de zapato puede contener el mismo porcentaje de proteínas que el mejor alimento, pero estas nunca se asimilarán de la misma forma. Por eso es que es necesario que la fuente principal de proteína, o el primer ingrediente de la lista sea carne.

No hay texto que hable acerca de alimentación que no toque al menos brevemente o como antecedente, qué son las proteínas, hidratos de carbono, lípidos o grasas, vitaminas, minerales y sus requerimientos en la nutrición del perro. Sin embargo, yo lo daré por obvio, ya que, afortunadamente los fabricantes de alimentos súper premium ya se ocuparon de todo esto y a nosotros sólo nos debe preocupar elmantener el balance adecuado, al no agregar en exceso otros alimentos, a su dieta. Esto, incluso de forma involuntaria. Por lo que hay que cuidar que el perro no tenga acceso ala basura, los desperdicios de la familia o que los niños no dejen comida o golosinas su alcance.

Guarde su alimento en un recipiente hermético, que permita mantener el alimento en las mismas condiciones desde la primera, hasta la última ración. Evite de esta forma que la humedad, polvo, insectos o roedores lo invadan. No es raro que las personas que mantienen el alimento en el bulto en el que lo compraron, que al final, las croquetas ya estén algo enmohecidas, debido a la humedad que pueden ir absorbiendo del ambiente o del suelo cuando se lava o trapea.

Nunca se debe cambiar la alimentación de un perro en forma repentina. Todo cambio deberá hacerse poco a poco. Empezando por un 10% del nuevo alimento y 90% del anterior. Posteriormente aumentará un 10% más del nuevo y reducirá el mismo porcentaje del anterior hasta completar el cambio en diez a quince días aproximadamente. Si se presentara una diarrea ligera, se deberá mantener la proporción que se le esté dando en ese momento, hasta que los síntomas desaparezcan. Si la diarrea durara por más de dos días o estuviera acompañada de otros síntomas, como vómito frecuente, temperatura alta, decaimiento o una diarrea excesiva, inapetencia o cualquier otro síntoma de mal estar digestivo; habrá que consultar a su veterinario, de inmediato.

Para determinar su ración diaria, puede basarse en primer lugar en la recomendación del empaque. En el reverso siempre tienen un cuadro que indica con relación al tamaño y edad del perro, más o menos cuanto debe comer. Empiece por darle esa cantidad durante unos seis u ocho días. Si ve que come demasiado rápido y se queda con ganas de más, puede aumentar poco a poco una cantidad pequeña, (hasta llegar a no más de un 20% del máximo recomendado por el empaque). Si ve que su perro no se acaba su ración, pero se encuentra de buen ánimo, sano, con una condición corporal y peso adecuados, entonces reduzca un poquito su ración hasta que encuentre la cantidad ideal para su perro.

La cantidad diaria puede variar de acuerdo al clima. Generalmente cuando hace frío, el perro requiere más calorías; cuando hace calor, menos. También puede variar según sea el nivel de actividad del perro. Si el perro lleva una vida activa, requerirá más alimento, si es más bien sedentaria, menos.

Para una hembra gestante habrá que cambiar a un alimento de cachorro en la sexta semana de gestación y aumentar la cantidad, según lo requiera. Luego del parto, la hembra necesitará comer cuando menos el doble de lo que normalmente come.

El alimento que come un cachorro debe ser más alto en contenido de proteínas y grasas que el que come un adulto. Debido a su crecimiento, sus requerimientos de estos nutrientes son mayores. Por eso es que hasta el año o año y medio cuando menos, hay que utilizar un alimento especial para cachorros. Hay marcas que tienen alimentos para cachorros de razas de diferentes tamaños. Para el dogo de burdeos yo no recomiendo utilizar el alimento para razas gigantes, ya que este está diseñado para que el perro crezca delgado, evitando así posibles problemas articulares. Así que a menos que su dogo los tenga, o sospeche que podría llegar a tenerlos, mejor utilice el de razas grandes o intermedias para que su dogo de burdeos tenga una condición corporal normal.

Dependiendo de la edad del perro, la ración diaria debe ser dividida en dos a cuatro comidas. Cuando son cachorros, digamos entre uno y tres meses, hay que alimentarlos cuatro veces al día. A partir de los cuatro y hasta lo siete meses, es bueno que hagan tres comidas. Posteriormente, sólo dos comidas son suficientes. Algunos textos aseguran que el perro adulto puede comer sólo una vez al día. Sin embargo, a mis dogos de burdeos, no me gusta darles sólo una comida por varias razones. a) Si pasan 23 horas sin comida, el perro tiende a devorar su alimento, sin masticarlo ni salivarlo adecuadamente, lo cual complica el proceso digestivo. b) Como perro de raza grande, sus necesidades de energía (medida en kilocalorías o megajulios) son muy altas, así que si divide su alimentación, en porciones más pequeñas, su asimilación es mucho mejor y es más factible que coma la cantidad diaria que necesita. c) Finalmente, pero tal vez lo más importante, es que de esta forma ayuda a evitar enfermedades del sistema digestivo y hasta una posible torsión gástrica (problema mortal).

Tenga cuidado con los excesos. La raza dogo de burdeos tiene cierta propensión a la obesidad, por lo que un balance adecuado de ingesta de carbohidratos y grasa, con actividad física diaria y adecuada, permitirán que su dogo crezca y se mantenga en óptimas condiciones, más sano y viva más tiempo felizmente. Una forma muy sencilla para evaluar la condición corporal del perro, es:

a- Un perro excesivamente delgado muestra a simple vista los huesos, especialmente los de la cadera (crestas iliacas) y costillar.

b- El perrito delgado es aquel que aún se le perciben las costillas con cierta dificultad, pero están claramente a la vista.

c- Se considera en buenas condiciones corporales a aquel perro que no muestra a simple vista los huesos, pero que al pasar la mano sobre el costado se alcanzan a sentir sus coastillas

d- En un perro con sobrepeso el costillar ya es difícil de sentir al pasar la mano sobre el cuerpo del perro.

e- Cuando al tocar el costado del perro ya no logramos palpar las costillas, entonces podemos decir que el perro tiene un problema de obesidad.

Lo anterior no es una regla, pero aplica a la mayoría de los perros. aunque para algunas razas pudiera variar. Sin embargo, la condición corporal ideal de un dogo de burdeos debe ser definitivamente en “c” o muy ligeramente pasado de ésta. Desafortunadamente, en la actualidad hay muchos dogos de burdeos en condición “d” y hasta “e”, Incluso en las pistas de belleza en donde se confunde el término “masividad” con “obesidad”. Hago un llamado a los jueces para que no premien a los perros que son alimentados excesivamente para cubrir sus carencias de masa y a los dueños para que eviten caer en esta “moda” canina. La obesidad es un problema que acarrea riesgos importantes al bien estar, salud, la fertilidad y hasta la vida del perro.

La rutina para alimentarlos también es muy importante. Yo acostumbro ofrecerles su ración durante 20 a 30 minutos y retirarles el plato al final de estos, independientemente de la cantidad que hayan consumido. Después de unos días de acostumbrarlo a esta rutina, el perro comerá rápidamente su alimento tan pronto se le ponga el plato a su alcance. Si un día o dos a la semana decide no terminar su ración, no se preocupe. Si empieza a hacerlo con mayor frecuencia, puede ser indicativo de que necesite disminuir la ración, temporalmente, por un cambio de nivel de actividad o de clima. Cuando un perro deja de comer por completo durante más de un día, hay que observarlo detenidamente, porque puede ser síntoma de una enfermedad.

Al retirar el alimento acostumbro meter el sobrante al refrigerador, identificando cada plato con el nombre de cada perro. Si este está muy mojado por la saliva, es mejor desecharlo para evitar que se descomponga o que se reblandezca demasiado. Especialmente si el sobrante es poco y más aún si no dispone de un espacio frío y lejos de alimañas en donde guardarlo.

El lugar y la hora del día también son muy importantes. Se debe procurar que su comida sea siempre en el mismo lugar, qué este sea un lugar tranquilo sin distracciones y que dentro de lo posible, establecer sus momentos de comida antes y después de las horas más calientes del día. Lo que yo procuro, para los adultos, es darle su primera comida al salir el sol y su segunda comida tan pronto se pone éste.

Siempre mantenga agua fresca y limpia y use recipientes limpios. Lave sus recipientes de comida después de cada alimento, al igual que lo hace con los de su familia. Así evitará muchos problemas y enfermedades gástricas.

Los dogos de burdeos no son especialmente glotones, por el contrario es más común encontrar dogos algo melindrosos. Es muy importante en esos casos no ceder a la tentación de adicionarle calditos, u otros alimentos que le den sabor, ya que eso sólo solucionará el problema por uno o dos días y luego los aderezos dejarán de surtir efecto. Cuando mucho es justificable añadir un poquito de caldo o alimento en lata, por un par de días, en periodos especiales (adaptación, viaje, estrés, recuperación, etc.) y luego reducirle poco a poco el aderezo hasta volver a la rutina mencionada antes.

Yo no recomiendo mezclar las croquetas con ningún otro alimento (pollo, carne, arroz, caldos, verduras, etc.). La croqueta de calidad super premium, ha sido balanceada con todo lo que el perro necesita. Si mezcla algún otro alimento, romperá el balance que científicos expertos en la materia han diseñado. Esto se reflejará en un desarrollo inadecuado del perro. Yo únicamente, utilizo alimento húmedo en lata para añadir sabor, cuando uno de mis perros definitivamente no quiere comer y por periodos cortos (enfermedad, cambio de residencia, viaje, etc.) o requiero que coma una cantidad adicional (durante la lactancia o periodos de recuperación o preparación para exposición).

En cuanto a complementar su nutrición con vitaminas y minerales, tampoco me parece recomendable bajo condiciones normales; ya que la croqueta tiene todo lo que el perro necesita. Si planea darle un complemento, primero consulte a su médico veterinario y muéstrele la bolsa del alimento que acostumbra darle. Así podrá ver la cantidad de vitaminas y minerales que contiene y planear el complemento más adecuado, si es que fuera necesario.

Si tiene problemas para que su perro suba o baje de peso, debe tomarse muy en serio y atenderse bajo supervisión de un veterinario. Pero mientras tanto, déjeme darle un consejo simple: procure que su perro siempre esté desparasitado (administre el medicamento que le indique su veterinario cada tres a seis meses).

Agradezco a Perros Pura Sangre el haberme permitido compartir estos consejos y espero sinceramente que al menos algo haya encontrado útil para mejorar la nutrición de su dogo. Si desea más detalles acerca de este tema o leer más consejos acerca del cuidado de su dogo de burdeos, por favor visite mi sitio en internet o escríbame por correo electrónico.

Arturo Martínez Mateos

Criadero Mont Rouge

www.monterojo.org

criaderoMR@gmail.com